viernes, 24 de octubre de 2014

Y si vemos a “Las clásicas del Terror”

Leyendo mis recortes de hace tiempo, encontré un artículo que mencionaba algunas de las mejores pelis de terror de antaño, ¡cómo me encantaría poder verlas todas! ya que sólo he visto unas pocas.

Quizás si las vemos ahora no nos asustarán mucho, de seguro las veremos como algo fingido o muy simple, y es que ya estamos acostumbrados a la tecnología de alta calidad de los efectos especiales, sin embargo estas producciones nos muestran historias dignas de ser conocidas y recordadas.

Entonces, aprovechando el mes de Halloween, les dejo el Top de mi lista imperdible para ver, por el simple hecho de ser clásicos en la literatura del terror, además teniendo en cuenta el tiempo en la cual fueron realizadas, muchas contienen escenas memorables con actores excepcionales que aún en la actualidad no han podido ser superados.

  • El hombre lobo (1913): Fue la primera aparición del temido hombre lobo. Cortometraje mudo con una duración de 18 minutos. Una india perdía a su esposo y esta transmitía a Watuma (su hija) todo el odio que sentía hacia los colonos invasores, la hija se terminaba convirtiendo en un lobo.
  • Nosferatu (1922): Una película muda, protagonizada por el actor Max Schreck como el conde Orlok. En realidad es una adaptación de la novela Drácula de Bram Stocker, como no se logró obtener los derechos de la historia, se optó por cambiar el nombre de la película y de los personajes. Sin duda alguna un clásico de clásicos en el cine del terror.
  • El fantasma de la ópera (1925): Clásico mudo, interpretada por el actor Lon Chaney como el enmascarado y desfigurado "fantasma" que reside en la Ópera de París y que trata por todos los medios posibles que la estrella de la obra se enamore de él, llegando incluso a cometer asesinatos. Él mismo Chaney se aplicaba el maquillaje para realizar su papel. 
  • Drácula (1931): Filme dirigido por Tod Browning y protagonizado por Bela Lugosi como el conde Drácula. Esta película si estaba basada en la famosa Drácula de Bram Stocker. El conde Drácula llega a Londres y se enamora de una joven que ya está comprometida.
  • Frankenstein (1931): Basada en la novela de Mary Shelley, y protagonizada por Boris Karloff quien le da vida al monstruo. Es un clásico considerado por muchos como el mejor de todos los tiempos. El doctor Henry Frankenstein y su ayudante jorobado Fritz crean un monstruo humano con trozos de cadáveres, quien desesperadamente busca su identidad.
  • El hombre y el monstruo (1931): Basada en la novela: “El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde” de Robert Louis Stevenson, y esteralizada por Fredric March, (que ese año ganó el Oscar al mejor actor por su interpretación en esta película). Ante un auditorio científico el doctor Henry Jekyll expone la teoría de que el hombre está dividido en dos personalidades, una positiva y otra negativa, y que ambas se pueden separar.  En su laboratorio Jekyll experimenta con una droga y se transforma en el señor Hyde y bajo esta personalidad se convierte en amante de Champagne Ivy, una joven artista de Music-hall.
  • La momia (1932): Protagonizada por Boris Karloff, y dirigida por Karl Freund. Unos arqueólogos británicos invaden la tumba de un cadáver momificado que resulta ser un sumo sacerdote del antiguo Egipto, por lo que accidentalmente reviven a la momia que intenta raptar a una joven de ascendencia egipcia que se parece a la princesa que amó y que fue el motivo de su ejecución.
  • La novia de Frankenstein (1935): Una combinación de terror, ciencia ficción y humor negro. Es la secuela de Frankenstein protagonizada por Elsa Lanchester, que encarna a Mary Shelley y a la novia del monstruo, y también vuelve a participar Boris Karloff (el monstruo) y Colin Clive. Aunque el dr. Frankenstein se arrepiente de su creación, es obligado a participar en la creación de una mujer para que sea la compañera de la criatura.
  • El jorobado de Notre Dame (1939): Protagonizada por Charles Laughton y exaltando su magnífica actuación como Quasimoso, el campanero jorobado de Notre Dame, quien se enamora de la gitana Esmeralda y también es pretendida por el archidiácono de la catedral Claude Frollo (padre adoptivo del campanero), el cual le pide a Quasimodo que la rapte. Sin embargo, el capitán Febo de Châteaupers impide el secuestro y lleva a Quasimodo a la flagelación pública.
  • El hombre lobo (1941): Protagonizada por Lon Chaney Jr. como Larry Talbot, el hombre lobo. Talbot se convierte en hombre lobo después de ser mordido por un lobo, es atrapado y luego al volver a su estado normal es liberado, sin embargo continúa con su maldición.
  • La criatura del lago negro (1954): Protagonizada por Richard Carlson. Una expedición de científicos por el Amazonas hallan a una criatura medio hombre y medio pez. Los exploradores capturan a la extraña criatura, pero éste logra escapar y regresa más tarde para raptar a Kay, la prometida de uno de ellos.
  • La cosa o La masa devoradora (1958): Protagonizada por Steve McQueen y dirigida por Irvin S. Yeaworth Jr. Resulta que un artefacto cae del espacio conteniendo una forma de vida desconocida que devora todo lo que toca.
  • La noche de los muertos vivientes (1968): Protagonizada por Duane Jones y Judith O´Dea. Película del subgénero del cine de zombis, donde resulta que la radiación de un satélite causa el despertar de los muertos que salen de sus tumbas y atacan a los seres vivos para alimentarse. Los zombis sólo pueden matarse con un golpe en la cabeza.




Y aunque ya no es tan antigua, no puedo dejar de mencionar a mi película favorita de toda la vida, para mí el clásico de los clásicos: Drácula de Bram Stocker (de 1992), interpretada por Gary Oldman como el conde Drácula, quien para mi es el conde perfecto. Esta película tiene una soberbia combinación entre el terror, el sacrificio y el amor, así que la recomiendo.

A preparar canguil para verla!!!

lunes, 20 de octubre de 2014

¿Y si nos damos abrazos? ¿Gratuitos o pagados?

Abrazar a alguien es ¡Sanador! Mejora el estado de ánimo, nos hace sentir amados, nos recarga las baterías e incluso pueden llegar a curar heridas profundas y aliviar el dolor y resentimiento del corazón.

No sé si habían escuchado sobre la campaña de darle un abrazo a un extraño que promueve la fundación “Abrazos Gratis”, un movimiento que se inició desde el 2004 y se convirtió en un movimiento de carácter internacional desde el 2006, donde simplemente uno se decide a lanzarse a las calles y abrazar a un desconocido, repartiendo afecto a nuestros semejantes.

Estudios realizados en universidades, han demostrado científicamente que cuando otras personas nos tocan o abrazan aumentan los niveles de oxitocina en la sangre, (conocida como la hormona del amor), se regula la presión sanguínea e incluso se mejora el sistema inmunológico.

Incluso se dice que es buenísimo de vez en mes abrazar un árbol, te contagias de la energía que emana la madre tierra y sientes que te revitalizas. La cultura celta creía que cada árbol tenía un espíritu sabio, que sus rostros se veían en la corteza de sus troncos y que sus voces se escuchaban en el sonido de las hojas que se movían con el viento.

Los abrazos son diferentes dependiendo de la persona a la que se lo des, o la persona que nos lo de. Hay todo tipo de abrazos, los que duran hasta “5 missisipis”, cortos, apretujados, con palmadas en la espalda y hasta superficiales, pero usualmente cuando son profundos y de corazón, son una terapia altamente recomendada (la abrazoterapia) por los beneficios que ofrecen directamente en nuestra salud.

Soy una persona bastante querendona (los que me conocen saben que es verdad) y no tengo problema en demostrarlo “changando” normalmente sin razón a quienes quiero, pero esto ¡sí que me sorprendió! Recientemente leí un artículo en el periódico sobre una empresa estadounidense que ofrece “Snuggle buddies” que en español sería algo así como “Abrazos o acurrucos pagados”, ellos basan su servicio en la “Teoría del tacto” y en los beneficios que hemos mencionado con anterioridad, incluso hasta tienen su equipo de “abrazadores profesionales”. Los precios varían dependiendo del tiempo que dure la sesión, ya sea una de 60 minutos o dormir abrazados toda la noche. Obviamente en el contrato se estipula claramente que el servicio no consiste en ningún tipo de actividad sexual.

En una sociedad en donde se nos ha enseñado a valorar el individualismo, parece ser que este negocio se ha vuelto bastante rentable considerando que la terapia consiste en abrazar al solicitante,  pero como leí algún comentario de alguien, será que debemos asustarnos del hecho que haya personas que se sientan tan solas que necesiten pagarle a una persona desconocida para sentir un poco de afecto en sus vidas.

Según psicólogos y psicoterapeutas, necesitamos cuatro abrazos al día para subsistir; ocho para mantenernos y 12 para crecer en el plano personal. Puedes comenzar haciendo este ejercicio y dedicarle unos 30 segundos enteros: Abraza a un familiar, un amigo, tu mascota o hasta tu peluche favorito, ya sea en la mañana o por la noche, seguro que esto te hace muchísimo bien.

En fin que tal si aprovechamos esta nota y corremos a abrazar a quienes queremos y necesitamos en nuestra vida, quizás ellos también lo estén necesitando. J

martes, 7 de octubre de 2014

Que la enfermedad no nos gane la batalla !!!

Uff! La semana anterior y esta que aún continúa he estado pasando con un virus terrible! Me he sentido mal, mal, remal y cuando ya he sentido que mejoro, medio hago algo y otra vez siento como si se me agotara la recarga de las pilas. Entonces se me ideó hacer un post con tips sobre como vernos “No tan mal” cuando estamos mal. Suena un poco superficial pero no es así, no hay razón para vernos más terribles de lo que de por si nos hace ver y sentir la enfermedad.

Obviamente lo ideal es siempre prevenir, llevar una alimentación adecuada, hacer ejercicio regularmente, tomar vitaminas que complementen nuestra alimentación, son algunas de las cosas que debemos mantener como rutina de vida para conservar un sistema inmunológico fuerte, sin embargo aún cuando nos cuidemos al máximo no somos de hierro y por ende podemos estar expuestos a algún virus de esos por cambio de clima, o de esos que están el aire y por esas cosas de la vida te eligió a ti como su huésped.

Cuando estamos enfermos, tanto nuestro cuerpo como nuestra mente se ven afectados, nos sentimos débiles y vulnerables, por lo que es importante aceptar la enfermedad y tomar las medidas respectivas para recuperar nuestra salud.

Lo primero que debemos hacer es: No automedicarnos, de seguro ya estamos cansados de oír esto, pero no lo llevamos a cabo. Una cita con el médico general no nos hace daño y por el contrario puede prevenir que se agrave lo que tenemos y aliviarnos con prontitud. Es importante seguir las recomendaciones que el médico nos indique.

Una vez que ya nos hayan medicado, y siempre y cuando no nos hayan dado reposo por unos días, debemos ponerle cara a las actividades diarias. Si es así, entonces podemos comenzar por nuestra ropa, lo ideal sería usar ropa mas suelta o floja, yo he estado usando pantalones frescos y suaves (tipo playeros) y camisetas sin mangas tipo básicas como las de MNG, me pongo mis sandalias y listo. El cabello también es otro aspecto, obviamente en estos días no tenemos el ánimo necesario ni para peinarnos, sin embargo podemos recogernos el cabello con una cola de caballo o alguna trenza sencilla si tenemos algo más de ánimo.

Investigando en internet, encontré lo siguiente: “Se ha descubierto que las emociones negativas, como la ira, la ansiedad o la depresión, y también el estrés, debilitan la eficacia de ciertas células inmunológicas”; es decir que hay que ser positivos. “Así como las emociones negativas hacen más vulnerables a las personas a contraer enfermedades, pero no las causan, las emociones positivas ayudan a sobrellevar la enfermedad y favorecen el proceso de recuperación, pero por sí solas no logran mejorar a la persona”. De seguro hemos oído hablar de la Risoterapia, y soy una creyente de que la risa y el buen humor ayudan a enfrentar estos momentos ya que permiten liberar las tensiones acumuladas; además la capacidad de mantener un buen estado de ánimo contribuye a que el sistema inmunológico funcione de manera más óptima.

Así mismo, si nos sentimos mal, no tenemos porque ocultarlo, decirlo a las personas a nuestro alrededor ayudará a que entiendan porque nuestro estado de ánimo está diferente. Muchas veces en estas circunstancias necesitamos de los demás, seguro siempre hay alguien dispuesto a ayudarnos, recordemos que la familia y amigos así como están para los momentos de alegría, también están en los momentos de enfermedad y dolencia. Además cuando ellos lo necesiten nosotros también estaremos dispuestos a darles una mano.

Claro, que como mencioné con anterioridad, todo esto es bienvenido cuando lo que tenemos no va más allá, si nos estamos sintiendo sumamente mal, lo más importante antes que todo es recuperar nuestra salud, es más que obvio que a nadie le gusta estar enfermo, pero lo importante es asimilar esta situación que puede ser circunstancial, y aprovechar la como un factor de crecimiento y si lo que debemos hacer es guardar reposo y estar en cama, se vale usar la pijama todo el día y toda la noche.

Y otra cosa, recordemos siempre dar la mano a quien está enfermo, incluso una palabra puede servir de aliciente y ayudar en la recuperación de alguien.

Bibliografía:
Las frases en comillas fueron tomadas textualmente de la página web: http://www.monografias.com/trabajos7/emsa/emsa.shtml